Hoy volvemos pa'spaña, pa unos por fín, pa otros que remedio. El avión sale a las 10.00. quién adivina a que hora nos levantan?.... jajaja, no habeís dao ni uno, a las cinco de la mañana, y es que estos chinos son mu raros, el check out del hotel hay que hacerlo antes de las 6 de la mañana, como en España las 12, sino te cuenta otro día. Teniendo en cuenta que amanace sobre las cuatro de la mañana y que allí se acuestan pa las 9 de la tarde, pues tiene algo de sentido.
Otras cosas curiosas, en veinte días no hemos visto ni una sola ambulancia, o tienen salud de hierro o el que no la tenga que se aguante. En Beijing conducen muchísimo mejor que en Chengdu, aunque eso no quita que a ni uno le daban el carnet en España, también juegan al tetris, aunque mas relajados, y por supuesto el peaton es siempre la última mier... de la escala. No se pueden tirar las colillas al suelo, pero puede escupir unos gapos que la tienen "toa encerá", la limpieza no es su fuerte, lo de pobre pero limpio, aquí mo vale, ves los bares o comedores donde paran los pekineses, y ni por una apuesta millonaria te sentabas alli, además suelen mostrar las fregonas en las entradas de los establecimientos, las ponen a secar, y es una maraña de hilos negros que asusta mas que una bruja, encima como no conocen nuestro invento para escurrirlas dentro de un cubo, lo hacen con las manos, ajjjjjjjjjjj, y por eso mismo se lo ahorran todo lo que pueden, y pasean la mierda de un lado a otro. La gente es amable en lineas generales y bastante educada, menos a la hora de mirar a los niños e inmediatamente mirar a los que empujan el cochecito intentando descubrir algún parecido, jeje que en la mayoría de los casos ni remoto. Los taxis, ese necesario enemigo, pues una vez que te has montado, son muy amables, lo dificil es que te paren, no sabemos si por llevar niño y cochecito, o por ser guiris o las ods cosas, pero cuando no les da la gana no te paran, será un misterio asiático, eso sí una vez montado, aunque te tiemn y den vueltas y vueltas, después de una hora hora pueden ser unos 5€, vaya chollo, eh?. Cosas que no se ven por la calle: embarazadas, estarán guardando reposo, minusválidos, la verdad es que lo tienen dificil, es muy dificil ir con un cochecito de niño pequeño así que con una silla de ruedas imposible. Comen cosas raras, lo mas raro que hemos visto, pinchitos de cabaillos de mar, da hasta pena, no? Trabajan todos los días, sobre todo los de la construcción, y hablando de eso, vaya edificios, yo quiero ser arquitecto en Beijing, que edificios, eso sí lo malo es que la mayoría de los días no se ven, hay una nube tóxica de contaminación que parece que andas en el Londres de Jack el destripador. Pero lo mejor de todo, es que quedan muchas, muchísimas cosas por ver (y probar...) y habrá que volver.
En estos momentos estamos sobrevolando Sverdslovsk, que por el nombre y la situación debe ser Rusia, se ve una cordillera que me imagino serán los Urales, todavía nos quedan 5 horas hasta París, ya llevamos otras 5, y por el moemnto el viaje tranquilo, hemos tenido suerte, había muchas plazas libres.
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